Este año el Instituto de Investigaciones del Pensamiento Peruano y Latinoamericano de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, Lima, distinguió la trayectoria del epistemólogo español Wenceslao J. Gonzalez [Leer aquí y aquí]. La premiación se dio en el marco de la primera parte del III Coloquio Peruano de Filosofía de las Ciencias Cognitivismo: su cientificidad y otros problemas (programado en el II Coloquio de Filosofía del Lenguaje y Lingüística), organizado por el Grupo Diaporein. Evento este en el que intercambió perspectivas con pares de, entre otras, la Universidad de Yale y la UNISINOS y en el que defendió magistralmente su ponencia El enfoque cognitivo en la Ciencia y el problema de la historicidad: Caracterización desde los conceptos (cuya versión publicable ya se encuentra en Letras V. 78; N. 113, ene-dic 2008).
Wenceslao J. Gonzalez (Universidade da Coruña) es uno de los profesores visitantes más prestigiados y prolíficos del Grupo Diaporein, y acaba de recibir la condición de miembro numerario de la Academia Internacional de Filosofía de las Ciencias.
El 19 de noviembre se llevó a cabo la elección, por unanimidad, del filósofo González en la que se hubo de otorgarle la condición de Académico de número de la Academia. González ya era, desde el 2007, Académico correspondiente.
Con tal motivo, el periódico La Voz de Galicia, le entrevistó de la siguiente manera:
Wenceslao J. González, titular de la Cátedra de Lógica y Filosofía de la Ciencia de la Universidade da Coruña, goza desde hace año de un sólido reconocimiento como investigador en los cinco continentes. Conferenciante habitual en campus como los de Pittsburgh, Stanford, Quebec y Helsinki, su trayectoria ha merecido el homenaje de universidades -por citar el caso más reciente- como la Nacional Mayor San Marcos, de Perú.
-Su presencia en la Academia abre una nueva ventana a su labor...
-Sin duda. Este reconocimiento internacional abre nuevas posibilidades y comporta nuevas responsabilidades. Ferrol saldrá beneficiada: está previsto que, en un futuro no lejano, tengamos un congreso de la Academia en nuestra ciudad.
-En una época de constantes cambios como la que habitamos, ¿qué aporta la filosofía de la ciencia a la interpretación de la realidad?
-Aporta muchas cosas para aclarar la ciencia desde una perspectiva interna -su lenguaje, estructura, tipo de conocimiento, méritos, fines y valores- y desde una vertiente externa: el nexo de la actividad científica con el conjunto del quehacer social.
-Y esa interpretación filosófica de la realidad, ¿de qué forma se diversifica?
-La filosofía de la ciencia tiene un plano general, que abarca lo común a las distintas ciencias, y un enfoque especial, que profundiza en lo que caracteriza a cada ciencia (física, economía, etcétera).
-¿Hasta qué punto es posible predecir el futuro?
-Depende de múltiples factores, entre los que está el tipo de fenómeno (natural, social o artificial) y nuestro conocimiento de las variables que lo acompañan. A mayor regularidad en esas variables, mayor predecibilidad.
-Personalmente, ¿qué cree que nos deparará este siglo, que casi acabamos de comenzar?
-Las relaciones entre ciencia, tecnología y sociedad se incrementarán. La actividad científica será cada vez más sensible a las necesidades sociales y se reforzará el análisis ético del quehacer científico.
-¿Cuál es la verdadera dimensión de las contribuciones que los investigadores europeos como usted han hecho a la filosofía de la ciencia?
-Es muy significativa, en términos intelectuales. Socialmente también se puede apreciar, sobre todo si se asume que «lo que mueve el mundo son las ideas». En el Congreso de Florencia sobre Evolucionismo esto se ha puesto de relieve.
-¿En qué proyectos está trabajando ahora?
-En un proyecto sobre filosofía de las ciencias sociales para la Fundación Europea de la Ciencia. Para el Ministerio, en un proyecto sobre ciencias de diseño y complejidad. Y para la universidad, en las XV Jornadas Sobre Filosofía y Metodología de la Ciencia.
Una de las actividades más destacadas de González en los últimos meses es el Workshop Explanation, Prediction and Confirmation in the Social Sciences: Realm and Limits, que organizó en Amsterdam en octubre y dentro del programa europeo.
[A propósito de su trabajo en torno al Evolucionismo y Darwin, la nota más reciente que en los medios es la reseña del 5 de diciembre que en el periódico El ABCDe las Artes y las Letras sobre su Evolutionism: Present Approaches (Netbiblo, A Coruña, 2008). Este misma reseña de Palo Luis Vara puede leerse pulsando en la imagen de este post.]
Wenceslao J. Gonzalez (Universidade da Coruña) es uno de los profesores visitantes más prestigiados y prolíficos del Grupo Diaporein, y acaba de recibir la condición de miembro numerario de la Academia Internacional de Filosofía de las Ciencias.
El 19 de noviembre se llevó a cabo la elección, por unanimidad, del filósofo González en la que se hubo de otorgarle la condición de Académico de número de la Academia. González ya era, desde el 2007, Académico correspondiente.
Con tal motivo, el periódico La Voz de Galicia, le entrevistó de la siguiente manera:
Wenceslao J. González, titular de la Cátedra de Lógica y Filosofía de la Ciencia de la Universidade da Coruña, goza desde hace año de un sólido reconocimiento como investigador en los cinco continentes. Conferenciante habitual en campus como los de Pittsburgh, Stanford, Quebec y Helsinki, su trayectoria ha merecido el homenaje de universidades -por citar el caso más reciente- como la Nacional Mayor San Marcos, de Perú.
-Su presencia en la Academia abre una nueva ventana a su labor...
-Sin duda. Este reconocimiento internacional abre nuevas posibilidades y comporta nuevas responsabilidades. Ferrol saldrá beneficiada: está previsto que, en un futuro no lejano, tengamos un congreso de la Academia en nuestra ciudad.
-En una época de constantes cambios como la que habitamos, ¿qué aporta la filosofía de la ciencia a la interpretación de la realidad?
-Aporta muchas cosas para aclarar la ciencia desde una perspectiva interna -su lenguaje, estructura, tipo de conocimiento, méritos, fines y valores- y desde una vertiente externa: el nexo de la actividad científica con el conjunto del quehacer social.
-Y esa interpretación filosófica de la realidad, ¿de qué forma se diversifica?
-La filosofía de la ciencia tiene un plano general, que abarca lo común a las distintas ciencias, y un enfoque especial, que profundiza en lo que caracteriza a cada ciencia (física, economía, etcétera).
-¿Hasta qué punto es posible predecir el futuro?
-Depende de múltiples factores, entre los que está el tipo de fenómeno (natural, social o artificial) y nuestro conocimiento de las variables que lo acompañan. A mayor regularidad en esas variables, mayor predecibilidad.
-Personalmente, ¿qué cree que nos deparará este siglo, que casi acabamos de comenzar?
-Las relaciones entre ciencia, tecnología y sociedad se incrementarán. La actividad científica será cada vez más sensible a las necesidades sociales y se reforzará el análisis ético del quehacer científico.
-¿Cuál es la verdadera dimensión de las contribuciones que los investigadores europeos como usted han hecho a la filosofía de la ciencia?
-Es muy significativa, en términos intelectuales. Socialmente también se puede apreciar, sobre todo si se asume que «lo que mueve el mundo son las ideas». En el Congreso de Florencia sobre Evolucionismo esto se ha puesto de relieve.
-¿En qué proyectos está trabajando ahora?
-En un proyecto sobre filosofía de las ciencias sociales para la Fundación Europea de la Ciencia. Para el Ministerio, en un proyecto sobre ciencias de diseño y complejidad. Y para la universidad, en las XV Jornadas Sobre Filosofía y Metodología de la Ciencia.
Una de las actividades más destacadas de González en los últimos meses es el Workshop Explanation, Prediction and Confirmation in the Social Sciences: Realm and Limits, que organizó en Amsterdam en octubre y dentro del programa europeo.
[A propósito de su trabajo en torno al Evolucionismo y Darwin, la nota más reciente que en los medios es la reseña del 5 de diciembre que en el periódico El ABCDe las Artes y las Letras sobre su Evolutionism: Present Approaches (Netbiblo, A Coruña, 2008). Este misma reseña de Palo Luis Vara puede leerse pulsando en la imagen de este post.]